HACIENDO EL CAMINO

Hacia el Santuario de nuestra mano

  Dependiento del tipo de acto, es decir, si es un grupo de peñas el que emprende el camino, un grupo de personas, o directamente es un acto preparado para la peregrinación como el Encuentro de Juventudes de cada año, se suele realizar una pequeña oración como se ve en la fotografia anterior.

    Una vez emprendida la marcha, en función de las condiciones climáticas y el tipo de subida que se realice, la marcha se realiza de noche o de día, factor que no influye para empezar a disfrutar del camino desde el principio, con la flora y fauna que nos ofrece la Sierra de Andújar.

    El camino transcurre con normalidad y sin ningún tipo de obstáculo natural, en una zona llamada Los Cerrillos, hasta llegar a una de las cuestas más conocidas por los peregrinos de este camino, la Cuesta el Reventón. No es que sea algo para alarmarse, pero si tenemos que utilizar un poco nuestra fuerza física hasta coronarla y disfrutar de un paisaje increíble. 

        A lo largo del camino podemos ir observando la variedad de flora que nos podemos encontrar a lo largo de inmensos cortafuegos por los cuales pasamos hasta que llegamos a un punto de parada y des Una vez recuperadas las fuerzas, emprendemos de nuevo nuestra marcha y nos adentramos de lleno en el corazón de la Sierra de Andújar, donde nos ofrece lo mejor de sus vistas.

El siguiente punto más importante, en el cual también realizamos una parada para, aparte de descansar, contemplar la belleza que nos muestra este paraje, es el Puente del Río Jándula.

       Como podemos observar en la fotografía, cada vez estamos más cerca de coronar nuestra llegada al Santuario o también conocido como El Cerro del Cabezo. Al pinchar en la fotografía para verla ampliada, podemos observar en la parte central superior, el Santuario.

    Un echo muy significativo que se produce durante la peregrinación, y que podemos    ver en la fotografía, es el Bautizo y confirmación de las personas que realizan este camino por primera vez como peregrinos, en un lugar lleno de encanto y belleza, conocido como Venero Pilar del Madroño, y más comúnmente conocido como Fuente del Madroño.


    Ya casi estamos llegando al final del camino pero todavía nos queda por ver y disfrutar de mucha belleza que nos sirve para abrir nuestros ojos y mente al máximo y así coger las últimas fuerzas para llegar hacia nuestra meta, que es poder ver a nuestra Virgen de la Cabeza.